
El llamamiento que nos hace la situación que vivimos es claro: cuidarnos y cuidar de los
demás, caminar unidos por el bien común como la salud, el cuidado de los más necesitados,
la cercanía y el ánimo a todos, la luz de la esperanza y la reconciliación…
En JESÚS vamos a encontrar a Aquel que nos ofrece VIDA, LUZ, CONSUELO… y que
se hace presente en el templo de nuestra existencia y de nuestra familia.